La batalla perdida por concienciar al
público sobre lo auténtico, en efecto está perdida. La gente básicamente no
hace lo que quiere, si no lo que puede. Aunque crees que eres libre de elegir,
lo harás siempre dentro del menú que te presentan, dentro de una relación
calidad/precio que no siempre está a tu alcance. ¿Te das cuenta? Pasan los años, las décadas y
los siglos… sí, también los siglos: desde noviembre a primeros de enero y
enlazando con las rebajas, se nos disfraza de forma implacable consumir más que
el resto del año, bajo una máscara de moral judeo-cristiana. Si quieres seguir
siendo un borrego, no sigas leyendo. Recuerda: es tu opción.
Un artículo de Miguel Lázaro
Eres libre de celebrar lo que
quieras, esa es tu opción: aunque traten de impedírtelo, de censurártelo,
aunque te quieran cambiar el nombre de la fiesta, aunque traten de borrar su
significado con máscaras políticamente correctas. Si lo sientes, hazlo. También
eres libre de no celebrarlo, es tu opción: aunque se te señale como bicho raro,
aunque te obvien socialmente por ello, aunque seas el raro o rara de la
familia, de la oficina, o de tu grupo de amigos por ello, aunque la
condescendencia generalizada te tache de alternativo. Igual te digo, que no lo
hagas si así lo sientes, pero siempre has de ser tú el que decida.