Me cuesta hablar de
amor. Me cuesta más aun hablar de amor verdadero. Es algo que tengo en un pedestal, en un altar. Jamás lo negaré. Y
si no uso esa palabra de forma habitual, es por respeto y conocimiento. Sí, conocimiento:
yo puedo decirlo porque es algo que te puede cambiar la vida gratuitamente y
sin esperarlo, por eso respeto esa palabra, ese concepto, esa forma de vida… y
desprecio desde lo más profundo de mi ser, todo aquello que trata de
disfrazarlo, por más políticamente correcto, actual, moderno e innovador que
parezca. Por más fórmulas que salgan al mercado, cada uno tiene y tendrá la
suya propia. Y no, jamás te diré que lo busques en una página de contactos, o
saliendo de día o de noche. Jamás te diré que serás feliz haciendo o diciendo
tal o cual cosa, o que te llevarás el premio gordo, si haces lo que yo te diga.
Solamente te pediré que lo encuentres, no que lo busques y en cuanto a ti, que
te dejes encontrar. No te quiero engañar, tengo que seguir mirándote a la cara.
SI ERES HOMBRE, DEJA DE PAGAR: LO QUE LAS MUJERES NO QUIEREN QUE OIGAS
Tengo una pregunta, y no
sé si alguien sabrá responderla. Es una pregunta absolutamente sincera, para la
que no encuentro contestación. ¿Preparado? Allá va: me gustaría saber, a qué se dedicarían todas las mujeres del mundo, que
ejercen la prostitución, si de pronto, abandonaran esta actividad. Te lo
estoy preguntando de verdad, es algo que quiero saber. Yo no quiero que exista
esclavitud sexual, ni mucho menos que pagues por sexo. Si pones en el buscador
de Google el siguiente texto: “porque tú
pagas…” enseguida, el autocompletado automático del buscador, termina solo
la frase de esta forma: “porque tú pagas
existe la prostitución”. Compruébalo. Bueno, esto es lo que dice Google y
las administraciones públicas, en sus campañas para penalizar al varón, que
hace uso de esta actividad. Pagar por sexo, desde luego que no es algo que se
utilice para presumir. Nunca he escuchado a un solo hombre jactándose de haber
pagado por sexo, sino más bien todo lo contrario. Pero si un hombre paga por
sexo, es porque existe oferta. Pero socialmente, se imputa al varón, o sea a la
demanda, de la existencia de la oferta, en este caso, la prostitución.
SE BUSCA MESÍAS “PARA TODO”
Después de una reunión
con William Wallace, Máximo Décimo
Meridio, Humphrey Bogart, Bruce Lee, Mahatma Gandhi y Sigmund Freud, hemos llegado a una conclusión: El Mesías no vendrá.
Empecemos por aceptar esa realidad. Ya vino una vez y nos lo cargamos
públicamente. No creo que tenga ni ganas, ni cuerpo para volver a la Tierra en
este plan, sabiendo que solo se va a encontrar con gentuza especialista en
“mirar hacia otro lado”. ¿Asumir responsabilidad? Por eso, el Mesías no
regresará nunca, porque en cuanto ponga un pie en tierra firme, le van a cargar
todas las culpas y responsabilidades habidas y por haber. Todos los desfalcos,
delitos, estafas, crímenes, robos, fraudes y deuda que habita sobre la faz de
la tierra: todo aquello por lo que reclama la gente –Ahí os pudráis hijos de puta ¿voy a bajar yo desde los cielos a
ayudaros? ¿Para qué? ¿Para que me echéis toda la mierda encima? ¡Anda y que os
den!- El Mesías, se va a quedar de cañas y en paz con los extraterrestres. Ya
vino una vez y salió escaldado. Es Mesías, pero no gilipollas. Estamos solos.
EXISTEN DOS TIPOS DE MUJERES: “NO ME JUZGUES POR MI PASADO” II por DANIEL DÍEZ
CUANDO ELLA TE DICE: “NO ME JUZGUES POR MI PASADO” por DANIEL DÍEZ
Y una
polla como una olla. Te voy a juzgar por tu pasado igual que tú me juzgas por
otras cosas como mi clase social, mi posición económica o lo “hombre” que soy ¿Pretty Woman? No existe tal cuento de
hadas. Para empezar, todos sabemos que no te puedes fiar de una prostituta.
¿Cuántos hombres con la dichosa película en la cabeza más una gran mentalidad
de escasez han empezado una relación con una “profesional”? Ya te digo yo, que
alguno habrá. En la mayoría de los casos siempre han salido escaldados. Hombres
que quieren y se “enamoran” de una prostituta y esta sigue “zorreando” con
otros mientras le saca la pasta al pobre pardillo. Una prostituta, salvo que
demuestre lo contrario, es una mujer que a base de tener relaciones sexuales
por dinero termina viendo a los hombres de una forma muy diferente al resto:
Los hombres son dinero con patas. No existen putas románticas. El romanticismo
se les fue de la cabeza a base de sexo con viejos asquerosos y con hombres que
las tratan como trozos de carne. Pero espera, que esto solo es la introducción,
ahora vamos a la vida real:
LA CHICA SE QUEDA CONMIGO
… Y no vale aquello de yo la vi primero. No la obliga nadie,
eso es lo que más te jode: que no puedes convencerla, que no tienes que
salvarla de ningún peligro, que no te mira a ti, que no te necesita, que no te
quiere. Asúmelo: no le gustas. ¿Todavía te preguntas por qué? Mírame y
respóndete a esta pregunta: Tú si fueras ella ¿te irías contigo mismo? ¿te
gustaría un tipo como tú? Empieza por ahí y deja de defender lo indefendible.
¿Cómo querrías ser? ¿me ves acaso afectado por una pesadumbre amorosa? Ya ves
que no. Creo que te pasa lo que a muchos, has confundido el servilismo con el
amor. Dime qué atracción puede tener ella por un hombre como tú, al que ya da por
hecho sin necesidad de mover un dedo. Te diría que me duele y que me solidarizo
contigo, pero no. El tema no va así. Quédate con tu autocompasión y tu
romanticismo. La chica se queda conmigo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)