Vaya por delante, que lo que uno lleva por
dentro solamente le pertenece a sí mismo, es suyo, es verdad y solamente el que
lo sufre lo entiende por vivirlo. Partiendo de ahí, te tengo que decir que para
bien, o para mal, si has nacido hombre, tu misión en esta vida no es pasarte el
tiempo mirando al cielo, suspirando y reflexionando, removiendo emociones o
recordar tiempos mejores. Estoy seguro, que dentro de ti, existen laberintos,
pasadizos, habitaciones o mazmorras llenas de tesoros, de objetos valiosos que
solamente tú conoces. Cosas que sabes a ciencia cierta que serían verdad, y que
te harían feliz si pudieras reproducirlas tal y como las concibes. Estoy tan
seguro de ello, porque en eso y a menos que seas un reptil o un pez, con una ínfima
capacidad de comunicación, sabes que lo que tú llevas por dentro, aquello
precisamente que te quita el sueño… es muy parecido a lo que llevo yo, a lo que
lleve mi padre, el tuyo, tu hermano y tu amigo. Por dentro estamos hechos todos
de lo mismo.
Sabiendo esto y dándolo por bueno, tienes que
saber que aunque estos sentimientos forman parte de ti, nadie tiene porqué
valorarlos, premiarlos, aceptarlos, concederlos o materializarlos por el mero
hecho de que existan, y que para ti sean la base de tu comportamiento, deseos o
incluso tus mismos objetivos vitales. Este podría ser un buen resumen de lo que
te quiero decir: Tus sentimientos son solo tuyos y te valen a ti. No le valen
al vecino, no le valen a tu novia, no le valen a la mujer a la que amas o por
la que aspiras, no le valen a tu mujer, ni a tu jefe ni al lucero del alba.
Insisto: solamente son tuyos.
Quiero que esto te quede bien claro, porque como
tuyos forman parte de ti y de nadie más. Hacen que te muevas, que te esfuerces,
que tengas ideas, ingenio, inventiva, capacidad para solucionar problemas… y
también de todo lo contrario: para cagarla, para hacer daño, para derrocharte,
desperdiciarte, abandonarte al ego, ensimismarte y auto-engañarte. Entiéndelo
de una vez: una cosa es lo de dentro, y otra lo de fuera. Lo de fuera, si te es
más sencillo, podríamos llamarlo los resultados. Aquí es donde tenemos que
dejar las cosas claras:
LO IMPORTANTE, NO ES
PARTICIPAR
Puedes sugestionarte todo lo que quieras, puedes
deformar la realidad, relativizar, reflexionar, cambiar tus esquemas mentales
para instrumentalizar un fracaso y aprender de él ¿te suena? A mí sí. Llevo
escuchándolo toda mi vida. Tú como hombre has venido al mundo para presentar
resultados, para transformar la realidad, para ejecutar misiones, para trabajar,
mantener y construir. Y nadie, absolutamente nadie, te va a premiar por
participar, ni por tener buena intención, ni por tener buenos sentimientos o
ideas bonitas.
Si estamos hablando de ella, sabes bien que una
mujer puede inspirar en ti cosas que ni si quiera harías, o sentirías por ti
mismo. Lo sabes tú, lo sé yo y lo sabían nuestros padres y ancestros, mucho antes
de que nosotros existiéramos. Jamás lo negaré porque sería una estupidez. Pero si
tú y yo, hoy estamos aquí presentes, no es porque nuestros ancestros tuvieran
sentimientos muy nobles y los exteriorizaran haciendo de este mundo un lugar
mejor. No fue así. Fue porque tuvieron una decisión y la ejecutaron. ¿Abrirse a
las emociones? Ábrete todo lo que quieras a las emociones, que ya será otro el
que haga lo que tenga que hacer.
Se acabó lo que se daba: se acabó la tontería, la estupidez, la feria, el auto-engaño, la sugestión y la piedad contigo mismo. No te voy a decir lo que tienes que hacer, aunque lo estés deseando como un febril borrego. Ahora sabes más que antes, porque lo que acabas de leer aquí es verdad. ¿Qué no te gusta? No te preocupes, siempre te quedarán las comedias románticas. Vamos ¿por qué no te largas? ¿todavía sigues aquí? Ya estás tardando…
Se acabó lo que se daba: se acabó la tontería, la estupidez, la feria, el auto-engaño, la sugestión y la piedad contigo mismo. No te voy a decir lo que tienes que hacer, aunque lo estés deseando como un febril borrego. Ahora sabes más que antes, porque lo que acabas de leer aquí es verdad. ¿Qué no te gusta? No te preocupes, siempre te quedarán las comedias románticas. Vamos ¿por qué no te largas? ¿todavía sigues aquí? Ya estás tardando…
No hay comentarios:
Publicar un comentario