Hubiera
jurado como real, que en un sueño vivido desde un hipotético limbo, yo mismo
elegía nacer en una época equivocada ¿Dónde estaría el desafío si no? Así que
me despedí desde esa ilusión de lugar inexistente en las 3D, de la tribu de
neandertales que aguardaba mi llegada. Después se me ofreció como destino turístico-vital,
el Medievo… pero era demasiado predecible para mí. Así que los cruzados, la
inquisición y los caballeros de órdenes épicas y nobles, también se quedaron
sin mi presencia. En mi sueño de ficción, me la jugué y quise aparecer, en una
época en la que nadie se percataría de mi presencia, de no ser por mi dudoso
exhibicionismo intelectual, bañado en simpleza, cuadratura y simetría, adornado
de un ego, al que desde siempre me ha costado mucho renunciar. Pues sí, así
vine al mundo, como un mindundi cualquiera, empleado por cuenta ajena, hijo de mi padre y de mi madre, con deseos de
arreglar el mundo, empezando por arreglarme a mí. Total, por intentarlo
¿verdad? Que no quede. No necesitas ser un líder mundial, si consigues afectar
el corazón de la gente que te rodea. Así se levanta a las personas, tocándolas
el corazón, como cuando se da la chispa de la vida en un trasplante, o cuando
se le dan dos palmadas en el culo a un recién nacido, para que se entere de
dónde está.
JAJAJA!... ¿DE QUÉ?
A
riesgo de no volver a recibir una sola respuesta, para cada una de las homilías
y comentarios que suelto, a través de mis queridísimas redes sociales, de las
cuales soy usuario, partícipe y cómplice, me dirijo a tu atención a causa del archisobreusado
jajaja! No quería escribir esto, pero
es que veo que de verdad hace falta decir algo. Lo primero, yo también soy
culpable, pero ¿Por qué se dice? ¿por qué parece necesario quitarle fuerza o
intención a las palabras, terminando la frase con un jajaja! Hay cosas que o se dicen, o no se dicen, pero decirlas y
terminarlas con un jajaja! es quitarles
fuerza, intención… abaratarlas a fin de cuentas. Si me conoces en el tú a tú,
sabes y recordarás, que una de mis citas célebres es: el lenguaje es maravilloso, porque me gusta mucho jugar con las
palabras, los dobles sentidos y a fin de cuentas, decir las cosas sin decirlas.
Eso mola, que te entiendan sin ser explícito, o incluso sin hablar. Los que se
pasan la vida buscando frases brillantes, para dejar en jaque a la mujer a la
que aspiran o persiguen, deberían aplicarse este pequeño cuento, el de decir
las cosas sin decirlas. Pero si eres explícito, lo eres y tampoco pasa nada,
siempre y cuando mantengas la corrección y la educación.
NO SEAS UNA PESETA BUSCANDO UN DURO, por ÁNGEL ALEGRE GARCÍA
Me
presentaré: soy Ángel Alegre García,
de Vivir al Máximo, y
atendiendo a tus berrinches de pataleta habitual, en plan “todo me pasa a mí” y “la
culpa de todas mis desgracias las tiene el gobierno”, hoy seré yo quien te
dé una homilía por vía extremeña. Para empezar te diré, que ni todo te pasa
solamente a ti, ni que el gobierno tiene la culpa de que no tengas novia. Sé
que no te lo tragas, y que te ves como la excepción más honorable, entre los
penes que habitan la faz de la tierra. Hace tiempo leí un post en el que el
gran Ramit Sethi
decía una frase que me llamó mucho la atención por lo bien que describe la
situación actual: “No seas una peseta
buscando un duro”. ¿Te sientes identificado? Porque la frase va por ti, que
sólo piensas en ti mismo y tus necesidades, sin tener en cuenta las de los
demás. Y por ti, que vives con la palma de la mano en alto, quejándote y
preguntando “que hay de lo mío”, cuando jamás has traído nada a la mesa. ¿Cómo
dices, que tú no eres de esos? ¿Que tú eres un ciudadano modelo y la culpa es
de la crisis? Te lo voy a dar mascadito, como a ti te gusta, a ver si así lo
entiendes mejor…
LA GUERRA TE HA SIDO DECLARADA
Tú
estás tan tranquilo, viviendo tu vida, trabajando, haciendo tus cosas… Un buen
día llaman a tu puerta y te dicen algo que te trastoca. Vienen a reclutarte.
Imagínatelo de esta forma, quiero que lo veas así, tal cual. Viene una comisión
de reclutamiento, formada por un tío con gafas con una carpeta, un sargento y
dos policías militares. Te dicen que sí o sí, les tienes que acompañar para ser
alistado, pasar una instrucción y entrar en combate vete tú a saber dónde. A
ti, como a mí, como a cualquier tío currito de a pie, se nos pondría cara de
gilipollas –Yo y… ¿por qué yo?- Quizás fuese tu pregunta y la mía. No tienes
opción, o vas o vas. Y si te niegas, te vas también, pero te vas detenido y a
la fuerza. Y después de pasar dos meses en un calabozo militar, te vuelven a
convocar… pero esta vez, vas “convocado de casa” y tu nombre ya está en el
listado de reclutamiento, te están esperando para la instrucción y si te
vuelves a negar, vas directo a trabajos forzados. ¿Qué? ¿Cómo se te queda el
cuerpo?
EL ÚLTIMO HOMBRE BUENO
Acostumbrado
a contarte historias cuesta arriba, muchas veces por la forma espartana y seca
que tengo de hablarte, parece que estemos en una continua guerra pírrica de
desgaste. Es así, porque es esta la forma en la que siento, y es así porque esa
es la postura que te vas a encontrar en el mundo en cuanto cruces la puerta.
Tengo mil y una discusiones en mi cabeza, mantenidas contra un rival incierto
al que me gusta ganar con brillantez. Sé bien que este fantasma, bien podría
ser yo mismo en otra época, ya que suelo atacarle dónde más le duele, y si
creo que es donde más le duele, es porque antes me ha dolido a mí. No es que
antes fuese un hombre malo y ahora me considere bueno. Soy el mismo, pero he
vivido más cosas: exactamente igual que tú. De todas formas, seguro que me
entiendes, porque es lo mismo de siempre: a la contra y remontando contra todo.
CINCUENTA “SORBESESOS” DE GREY ¿ERES GUAPO Y MILLONARIO?
Bueno, hoy la cosa va
de sexo: Ya está otra vez éste tío con
sus batallas perdidas, podrás pensar. Me la pela de aquí a Laponia, pero como siempre te lo voy a
pintar clarito, como a los niños pequeños para que lo entiendas. Los tres
libros de Cincuenta Sombras de Grey
arrasan entre el público femenino ¿por qué? No voy a usar el argumento facilón,
de comparar la novela erótica con pornografía hecha para mujeres, aunque la
razón por la que lo consuman esposas y novias, habla mucho de lo que carece su
vida en pareja. Vamos, como cuando tú ves porno y flipas con las cosas, que
jamás te haría tu mujer o tu novia en la cama, si es que la tienes. Precisamente
las mismas cosas que ella te haría con los ojos cerrados, si realmente fueras
su verdadera fantasía sexual ¿Te molesta? Te aguantas, es así. De todas formas,
es un argumento muy manido y a lo que voy, es a otra cosa. Normalmente las
personas de alto estatus, o de muy alto estatus, no se divierten de la misma
forma, en la que nos podamos divertir tú y yo. Ni fuera, ni dentro en la cama
con una mujer, nuestros vicios y virtudes, si bien tienen raíces comunes, un
elevado estatus, hace que tengas muchas más opciones que cualquiera, en cuanto
a sexo y opciones sexuales se refiere. De eso estamos hablando, pero eso ya lo
sabes.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)